Incumple Villa Clara con la zafra azucarera.

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Por Ramón Avalos Rodríguez

 Se esperaba un salto superior pero no fue así. Apenas unas cinco mil toneladas se dejaron de hacer y Villa Clara concluyó la zafra azucarera sin alcanzar la meta productiva y sin dar el esperado  dulce alegrón. Quedó el sabor amargo del incumpliendo.

 Las causas  fueron evaluadas durante el balance que presidió Julio Lima Corzo y Jorgelina Pestana   Mederos, Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) y presidenta del gobierno en la provincia, respectivamente.

 Dificultades en los rendimientos agrícolas y fabriles,  pérdida de tiempo industrial, exceso de interrupciones operativas en varias industrias,  atrasos en la arrancada, fisuras en la  capacitación y preparación del personal, además de problemas organizativos y otros de índole subjetivo centraron el  análisis para evitar la repetición de esos   errores en la venidera contienda.

  La situación más crítica se experimentó en las unidades empresariales de base Carlos Baliño,  Héctor Rodríguez y Perucho Figueredo, que tampoco cumplieron sus planes.

 Ese objetivo lo lograron Heriberto Duquesne, Abel Santamaría, Panchito Gómez Toro e Ifraín Alfonso, calificadas estas tres últimas entre las diez mejores del país.

 Y aún cuando la máxima autoridad política de Villa Clara reconoció el esfuerzo y la consagración de los agoazucareros, el resultado no se correspondió con el saldo final,   no siendo  la mejor manera de honrar a los nombres de los mártires que  llevan nuestros ingenios.