Se recupera el sector agroazucarero de Villa Clara tras los golpes de IRMA

 Por Ramón Avalos Rodríguez

 Lograr la reparación de los centrales  y la recuperación de las  plantaciones  cañeras dañadas  tras el paso del huracán Irma constituye  tareas priorizadas de los trabajadores  de este sector en Villa Clara  con el propósito de iniciar la zafra que se avecina en la fecha  planificada.

 Andrés Durán Fundora, director de la empresa provincial, dijo que aún cuando  en los diez centrales con que cuenta la provincia ocurrieron afectaciones, las mayores estuvieron concentradas en Perucho Figueredo y Abel Santamaría del municipio de Encrucijada, así como Héctor Rodríguez de Sitiecito en Sagua la Grande.

 Precisó que, en el caso de las labores de alistamiento de los  ingenios para iniciar la próxima contienda deben cerrar septiembre al 60 por ciento, compromiso al cual se puede llegar  en medio de la actual situación.

 Igualmente tuvo  perjuicios  la infraestructura logística y de aseguramiento de las empresas de apoyo, en las que  se cuantificaron daños en  varios miles de  tejas de zinc y fibrocemento.

 El directivo también  puntualizó que en  la actividad agrícola  un total de  doce talleres  de la mecanización sufrieron los embates de  IRMA junto a las siete bases de transporte  (TRANZMEC), en mayor medida las ubicadas en Sagua la Grande, Calabazar de Encrucijada, Riquelme en Quemado de Güines y Chiquitico Fabregat en Remedios.     

 Frente a este  escenario, la decisión fue   reubicar  la reparación de las combinadas cañeras en aquellos talleres donde existieran mejores condiciones y no fueran expuestas a la intemperie, según explicó la Durán Fundora.

 Aseguró  que las mayores afectaciones estuvieron en las plantaciones cañeras donde  56 mil hectáreas quedaron acamadas y de ellas 36 mil se inundaron, las que hasta la fecha han sido drenadas.

 Toda esta situación  tiene su efecto sobre los rendimientos agrícolas donde las pérdidas se estiman por encima del 20 por ciento, con la mayor incidencia en tallos partidos, cañas defoliadas y  cepas promovidas, que podrían tener su afectación al aporte fabril.

Según la fuente, se ultiman detalles en el alistamiento  de las refinerías George Washington de Santo Domingo y Quintín Banderas de Corralillo para reiniciar  el procesamiento de un volumen importante de toneladas azúcar, donde se encuentra una  parte mojada por el fenómeno hidrometeorológico, a fin de cumplir el compromiso pactado para el 2017.