Los impuestos constituyen el sustento básico del presupuesto y son garantía de su sostenibilidad.

Por Ramón Avalos Rodríguez

      El cobro de los tributos nada tiene que ver con una sanción, como aún piensan muchas personas, por el contrario son una necesidad para cualquier estado, pues van a formar parte de los financiamientos dirigidos a sufragar  los cuantiosos  gastos sociales.

      Para nuestra realidad  resulta habitual recibir asistencia médica y educación junto a otros servicios sociales de forma gratuita. Habría que preguntar, entonces ¿Cuántas personas han pensado  por un instante sobre la fuente generadora de un dinero que el  Estado emplea para sufragar esos elevados gastos?

      Por ejemplo, sabe usted a cuánto asciende el monto de los recursos financieros que destina  Villa Clara  al sistema educacional, salud y seguridad social: nada más y nada menos que las dos terceras partes de los gastos presupuestados para fines sociales, decir más del 70 por ciento.

      Amén del actual escenario  por el cual transita nuestro país, signado por una difícil  coyuntura económica se sostiene la atención de esos y otros servicios imprescindibles para la sociedad  villaclareña. Para eso el Estado necesita recursos disponibles, de lo contrario lo convertimos en un ente muy frágil e incapaz para enfrentar sus funciones.

     Insistimos en esta idea, el pago del tributo es un deber social y está dirigido a cubrir los gastos en que éste incurre el estado con el fin de satisfacer los requerimientos de la sociedad, muchos de los cuales son gratuitos.