El igualitarismo empresarial: un obstáculo para la implementación de los Lineamientos.
Comentario
Por Ramón Avalos Rodríguez
Del mismo modo que la distribución igualitaria tiene efectos nocivos sobre la conducta de las personas, así también lo tiene en la gestión empresarial cuando se quieren hacer las cosas midiendo a todos por el mismo rasero, tras lo cual subyacen elementos de incompetencia, ineficiencia y acomodo, aún cuando en la intención de muchos no sea así.
Puede ser también la respuesta normal de un burócrata empedernido, atado al modus operandi en la administración que siempre acostumbró y muy difícil despojarse de esos métodos en los actuales momentos.
Ejemplos, existen muchos. Yo les ilustraré con solo estos. En el sector azucarero aplicar los sistemas de pago por igual a las industrias, tengan más o menos trabajadores lo cual afecta o beneficia la tasa: o la empresa eléctrica al aplicar los mismos límites en el consumo energético a los núcleos, sena de dos, cinco o 10 personas. El consumo no es igual, por tanto no pueden tener iguales escalas, pero siendo así es menos complejo el trabajo y el calentamiento de las neuronas.
Por eso, aceptar la implementación de los lineamientos significa romper con ese modelo de pensamiento, muy difícil también luego de tantos años caminando así con esa matadura.
No significa que estemos abogando por el regalo, el paternalismo, la tolerancia, la blandenguería y el libertinaje. Son tiempos de cambios, pero rompiendo esquemas que aún lastran el deseo de que los lineamientos se abran paso con la menor cantidad de obstáculos y zancadillas.
Está claro que el proyecto igualitario - paternalista y voluntarista que por un buen tiempo trilló nuestro quehacer naufraga poco a poco, pero todavía está vivo y a partir de ahora puede ocasionar daños muy fuertes en la buena marcha de la economía, porque todavía no todos han comprendido esa necesidad de liquidarlo.
0 comentarios