¿Hay inflación en nuestra economía?

Comentario:

 Por Ramón Avalos Rodríguez

 No puedo decir cuantas pero son muchas las veces que se han acercado  personas para preguntarnos  si hay o no inflación en nuestra economía.

 La insistencia nos ha llevado a hablar sobre el tema, bien peliagudo por cierto y donde los criterios son diversos. Pero bueno, nosotros daremos nuestro punto de vista.

 Con mucho pesar hay que decir  que sí, pero a diferencia  de lo que explica la teoría, que dice en pocas palabras que se trata de demasiado dinero persiguiendo a pocos productos, en nuestra práctica cotidiana se expresa con  poco dinero persiguiendo a pocos productos. Parece un trabalenguas, pero piense y se dará cuenta que es así.

 ¿Qué está ocurriendo con la oferta? Es decir, cantidad de productos que acceden a los mercados. No satisfacen la demanda y ¿Quién la regula aún cuando  se impone la planificación?. El precio, siempre en ascenso, tanto en el mercado  estatal como en el no estatal. Para no seguir utilizando el mal concepto que desvirtúa un fenómeno económico, el mercado de oferta y demanda, pues ambas categorías están presentes en todos los mercados.

 Alguien dijo una vez, estamos en presencia de dos clases de inflación: la que se palpa a diario y la reprimida, esa que a veces no vemos.

 También leí en una oportunidad  esta frase,"mientras los  salarios suben por la escalera, los precios lo hacen por el ascensor". Toda una verdad de Perogrullo.

 Señores, podrán o no estar de acuerdo y, aunque es verdad  que se han dado  algunos incrementos salariales, mínimos,  en nada han ayudado a contrarrestar la inflación, por el contrario no han hecho más que potenciar su  efecto en ese proceso por no tener un aumento proporcional al de la producción. Es decir, no existe  oferta de bienes y servios suficientes para presionar hacia abajo los precios.

 Podríamos preguntar si existe o no inflación cuando  una libra de frijoles negros vale 12 pesos, una  cabeza de ajo 2.00, una libra de cebollas por el Estado 4.50, una libra de espaguetis 15 o una libra de queso 30, por no hablar de otros, excluyendo las carnes.

 Es verdad también que en no pocos informes se dice que la productividad crece, sin embargo  la capacidad adquisitiva del dinero cada vez es más reducida.

 Y aunque  en los Lineamiento aprobados por el Sexto Congreso del Partido, se exponen las principales medidas no directamente monetarias para resolver los problemas de la producción y la masa monetaria, queda un buen trecho por andar.