Se acercan los agroazucareros al momento de grandes emociones
Por Ramón Avalos Rodríguez
Los agroazucareros de Villa Clara entraron al play off de la zafra para levantar la dulce copa de los campeones y vivir grandes emociones. Han pasado varios años sin que la provincia pueda disfrutar de ese empalagoso alegrón y parece, como dice el dicho popular, que en esta va la vencida.
Inmensos están los centrales Héctor Rodríguez, Panchito Gómez Toro, Ifraín Alfonso y Carlos Baliño liderando la ofensiva al exhibir molidas similares a un jonrón con las bases llenas. Entre ellos estará el primer clasificado de esta contienda.
Una trinchera poco halagüeña ocupa Abel Santamaría junto a José María Pérez, por dolencias en el brazo industrial, situación esa que los ha sacado de juego en varias ocasiones y no se recuperan del mal sluguin, parece que tendrán que esperar a la próxima contienda.
Por su parte, los hombres y mujeres del Perucho Figueredo se dieron cuenta que para ganar en esta lid hace falta moler, o como se dice en el lenguaje beisbolero batear, ser combativos y halar parejo. Al menos dejaron el banco de las bajas operaciones y gradualmente van en ascenso, lástima que no lo hicieron desde el principio, la deuda sería diferente.
Otro al que también le ha fallado el picheo es al central Heriberto Duquesne, pero en las últimas semanas le imprimieron al procesamiento industrial su acostumbrado dinamismo contando con la experiencia de los agroazucareros hechos que allí laboran y se acercan al cumplimiento de su meta productiva.
Es verdad que esta es la etapa donde los brazos comienzan a sentir el cansancio de los lanzamientos, por lo que son momentos que requieren de unidad, disciplina, orden y eficiencia para que los agroazucareros villaclareños, aún cuando unos estén bien y otros mal, impongan su estirpe de tradiciones y triunfen combinando juventud y experiencia como pieza clave para la victoria
Por eso, las mejores emociones de esta contienda están reservadas para la jornada del Primero de Mayo, cuando frente al Che desfile ese dulce ejército cargado de alegría y emociones por el resultado añorado.
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