S.O.S en el ahorro del agua ante la sequía.

 Por Ramón Avalos Rdodíguez

 Se acercan  situaciones  difíciles y complejas  ante el  inmenso riesgo de  no contar con la cantidad de agua necesaria para  nuestra subsistencia, lo  que tanto previó nuestro invencible comandante en Jefe Fidel Castro en no pocas tribunas internacionales.

 La profecía sobre la posibilidad de  llevar a la humanidad  a un enfrentamiento  bélico  a partir  del agua,  parece estar mucho más cerca de lo pronosticado.      

 Cuba y nuestra provincia de Villa Clara son ejemplo de  cuan  necesario  es  disponer de ese preciado líquido  en las cantidades que demandan el consumo estatal, privado y  de la población.

 Sin embargo, no existe  aún la total percepción del riesgo  que  supone  utilizar racionalmente  el agua, incumpliéndose la disciplina para evitar su despilfarro, es decir aún no se ha ganado total conciencia con respecto a la sequía y la escasez de agua.

 Y aunque la intensa sequía  motiva  un llamado a su  ahorro, todavía hay oídos sordos.

 Ejemplos sobran, basta recorrer las calles de la ciudad de Santa Clara, por no mencionar  otros municipios, donde los salideros  pululan y corre  más agua de la que entra a hogares y entidades.

 Hace pocos días escuché  a un grupo de personas calificando a la comunidad de culpable de los salideros en las calles. Este reportero piensa que sí,  la comunidad tiene su parte desde el hogar, pero no se le puede eximir de su responsabilidad a las entidades encargadas del mantenimiento de las  redes hidráulicas, que es parte por lo cual existen. Esta es una tarea conjunta, de todos.

 Lo cierto es que  estamos ante el imperativo de ahorrar  agua para garantizar  el futuro inmediato. A propósito, nos recuerda lo que expresó una vez el famoso poeta inglés W.H.Auden  cuando dijo "Miles de personas han sobrevivido sin amor; ninguna sin agua". Toda una realidad.