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Firman código de ética dirigentes sindicales azucareros

Firman código de ética dirigentes sindicales azucareros

Por Ramón Avalos Rodríguez

     En el mausoleo Frente Las Villas, del Complejo Escultórico Memorial “Comandante Ernesto Che Guevara de Santa Clara donde descansan desde el 17 de octubre de 1997 los restos mortales del Guerrillero Heroico  y sus compañeros de lucha en la guerrilla boliviana, se llevó a cabo la firma del código de ética de los miembros del Comité Provincial del Sindicato azucarero de Villa Clara en la tarde del pasado 28 de septiembre.

    Nuestra Revolución exige hoy, que la actividad de los cuadros de dirección posea valores morales tan altos como los legados por el Che junto a los héroes y mártires que  reposan en ese sagrado lugar villaclareño

    Nuestros cuadros deben dar muestra de profunda sensibilidad revolucionaria y un claro sentido del deber y allí, entre revolucionarios, quedó plasmado este compromiso de los principales líderes sindicales azucareros de esta provincia.

    El solemne acto de firma fue iniciado por Orelvis Sosa Moya, secretario general del sindicato de los trabajadores del sector,  quien luego de dar paso al resto de los miembros del comité, dijo este momento se suma al conjunto de acciones que se realizan como parte de la preparación y formación de los cuadros y el fomento de  la cultura ética y los valores en la organización.

 En correspondencia con ello, los miembros del comité provincial del sindicato azucarero se comprometieron a hacer suyos los siguientes preceptos:

 • Ser sincero, no ocultar ni tergiversar jamás la verdad. Luchar contra la mentira, el engaño, la demagogia y el fraude.

• Cultivar la vergüenza, el honor y la dignidad.

• Fomentar y cumplir la disciplina, el respeto y la lealtad conscientes al Partido, a la Constitución y demás leyes.

• Educar y practicar la exigencia y el respeto consigo mismo y con los demás.

• Ser estricto cumplidor de los compromisos y de la palabra empeñada.

• Combatir la apatía, la indolencia, el pesimismo, el hipercriticismo y el derrotismo.

• Ser honrado y practicar consecuentemente la crítica y la autocrítica.

• Considerar como actitud dañina el espíritu justificativo, la inacción frente a las dificultades y errores y la ausencia de iniciativas.

• Saber rectificar buscando soluciones nuevas para problemas nuevos y viejos.

• Vincularse con los trabajadores y el pueblo, demostrar respeto y confianza en ellos y sensibilidad para percibir sus sentimientos, necesidades y opiniones.

• Basar las relaciones de amistad en la coincidencia de los principios y en la moral revolucionaria.

• Mantener una correcta administración de los recursos del Estado.

• Utilizar las prerrogativas y facultades inherentes al cargo así como los medios y recursos conferidos, sòlo para los requerimientos del trabajo.

• Entregarse por entero y con amor al desempeño cabal de la responsabilidad encomendada.

• Observar en su actividad laboral y social un estilo de vida que le haga acreedor al respeto y la confianza de los demás.

• La administración estatal no confiere ningún derecho, ni ninguna preferencia sobre los demás que no cumplen esas funciones.

• La corrupción denigra tanto a quien incurre en ella como a quien la tolera.

• Compartir con los subordinados las dificultades y los grandes esfuerzos, aportando y exigiendo todo el empeño y consagración necesarios.

• Apoyarse en el razonamiento colectivo y en la capacidad personal para tomar decisiones.

• Decidir, dentro de las facultades que le corresponden, sin aguardar por orientaciones superiores innecesarias, y sin temor a las consecuencias de un eventual error personal.

• Desarrollar la disposición al diálogo y a la comunicación eficaz con el colectivo.

• Ser discreto y viabilizar la información pública.

• Fomentar una política de cuadros sobre las bases del mérito y la capacidad.

• Considerar la competencia profesional, la integridad moral y el mejor derecho del trabajador sobre la base de la idoneidad y la capacidad real probada.

• Asumir la autoridad otorgada como un honor y un compromiso, nunca como una ventaja personal.

• Asumir y contribuir, conscientemente desde sus funciones, a defender, preservar y ser fiel a los principios que entrañan la Patria, la Revolución y el Socialismo.

La actividad contó con la presencia de Armando Wide, en representación del la CTC de la provincia.

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